¿QUÉ SABEMOS DEL COACHING PARA EJECUTIVOS?

Si quieres conocer más de esta disciplina, el profesor de Academia Inpact, Ricardo Escobar explicó a Revista Icimag (www.icimag.cl) lo que significa esta herramienta, sus alcances y cómo ayuda a potenciar a profesionales que lideran organizaciones.

¿Qué es el coaching para ejecutivos? 

Es una especialización del coaching donde el coachee es un ejecutivo que trabaja en alguna organización, lo cual implica entender primero algunas premisas claves para asegurar el éxito del proceso:

1.      Las metas no son negociables, pues no necesariamente son definidas por el mismo ejecutivo.

2.      Los tiempos de cumplimiento son impuestos por el sistema.

3.      El ejecutivo tiene un sistema alrededor que influye en su desempeño y, entre otras cosas, lo evalúa.  

¿Para qué sirve?

Para ayudar al ejecutivo a desarrollar competencias o a resolver obstáculos que impiden su mejor desempeño, siempre y cuando esos obstáculos estén en su círculo de influencia.

¿Cuándo se hace necesario tomar esta herramienta?

En casos de desarrollo, cuando se trabajen competencias no técnicas que no pueden desarrollarse solo con entrenamiento formal. En casos de desempeño cuando los obstáculos sean generados por el mismo ejecutivo esencialmente con creencias limitantes que le quitan recursos y le generan comportamientos inefectivos.    

Ya para concluir, ¿nos podrías compartir algún caso de éxito que hayas trabajado tú y donde hayas vistos resultados positivos?

Creo que lo más difícil y  a su vez lo que más enriquece al ejecutivo, es ayudarle  a concientizar sus creencias limitantes y el impacto que están generando en su comportamiento y por ende en sus resultados. Uno de los casos más retadores que enfrenté fue ayudarle a un ejecutivo muy enfocado hacia la gente y considerado un excelente líder, a desenvolverse asertivamente frente a sus colegas cuando lo nombraron director de un área y tenía que entrar a comités de dirección. Resulta que era mormón y para él la humildad era un valor esencial, su gente lo admiraba por esa humildad pero esa misma “virtud” se convertía en “defecto” frente a sus colegas. El gran cambio vino cuando entendió de donde venía el origen de esa falta de asertividad.